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domingo, 21 de octubre de 2012

Algo diferente: mermelada de calabacín

Me encanta el calabacín.
 
Lo como de un millón de formas y casi-casi podría decir que no me canso de comerlo.
 
Pero solo casi-casi...porque este año por poco me da algo!!
 
Ha sido el primer año en que hemos tenido huerta. Y como tal, hemos pecado de novatos.

 
Somos dos en casa. Ni idea de cuán productivas podían llegar a ser las plantas de calabacín. Así que todo inocentes, pusimos 9 plantas.
 
9
 
¡¡Madre de dios!! De mayo a principios de octubre hemos tenido calabacines sin parar! Tenemos el congelador lleno de calabacín. No nos entra absolutamente nada más. Ni un tupper.
 
Había que darle salida de alguna manera. Y me acordé que mi ama me había dicho que en una tienda vio que vendían mermelada de calabacín.¡Mi salvación! Aunque ya se ha acabado la temporada de calabacín...
 
Con el último calabacín (sin contar mi congelador, claro) decidí hacer la prueba. Busqué en internet si encontraba alguna receta y encontré bastantes. Cada una lo hacía de una manera, así que como me pasa siempre, de cada una me voy quedando con algún concepto y luego lo hago un "popurrí" en casa.
 
Hoy os explico cómo la hice y las cantidades que usé, pero podéis adaptarlo a lo que tengáis:

MERMELADA DE CALABACÍN

Ingredientes:
  • 1 calabacín
  • 440 g. de azúcar (la mitad del peso del calabacín)
  • zumo de un limón
Preparación

Pelamos y lavamos el calabacín. Lo pesamos para saber exactamente cuánto calabacín tenemos. Lo cortamos en dados y los echamos en un bol.














En el mismo bol ponemos el azúcar y el zumo de limón y lo dejamos macerar durante unas 6 horas para que el calabacín suelte el agua.


Ponemos nuestra mezcla en una cazuela y lo dejamos cocer a fuego medio durante 45 minutos. Según el agua que tenga el calabacín puede tardar más o menos. Tenéis que ver que el líquido se haya evaporado casi todo y que el calabacín está muy muy blando, casi como puré.
Lo quitamos del fuego y lo pasamos por la batidora para que no queden trozos de calabacín.
Lo echamos en botes de cristal aun caliente, los tapamos y los dejamos boca abajo. Esto servirá para que se haga el vacío y no se quede aire en la mermelada que la puede estropear.
 
NOTA: para la cantidad de azúcar, depende de la cantidad de calabacín y de lo dulces que os gusten las mermeladas. Hay que poner la mitad de azúcar que de calabacín como mínimo, y la misma cantidad de azúcar que de calabacín como máximo.

 
Y ya tenemos una mermelada de calabacín deliciosa!! La verdad que tenía mucho miedo cuando la hice, porque olía bastante mal...como a la calabacín crudo. Y pensaba: "ay dios qué asco, seguro que está malísimo y yo aquí con dos botes" Pero cuando se enfrío la probamos y ¡sorpresa! De primeras no sabes muy bien qué sabor tiene, pero luego de deja como un sabor a membrillo delicioso. Ideal para comer con queso freco o crema de queso.

 
Perdonad que no tenga más ni mejores fotos, pero creedme que merece la pena intentarlo.
 
La próxima entrada será más vistosa, prometido.
 
Muás!!!!
 
Iratxe

lunes, 6 de agosto de 2012

Otra de cupcakes salados!

Aunque parezca mentira...¡¡¡¡¡ya tengo toda la cocina montada!!!! Con encimera y todo!! jajaja. Así que ya os podéis preparar que estoy a tope!!


El sábado, día 4, empezaban las fiestas de mi ciudad Vitoria-Gasteiz. Para celebrarlo y para inaugurar la casa, comimos con mi madre. Y como me quería quitar el mono de horno pero no iba a hacer postre porque ya teníamos, pues opté por hacer unos cupcakes salados, que las otras veces que he hecho han sido un éxito.


Vale, magdalenas saladas. ¿De qué? A ver qué tengo por casa...calabacín. Por todas partes. Tenemos una huerta que no da más que calabacines!!!!! Así que tenía que ir dándoles salida. ¿Qué más? Con atún tiene que quedar rico seguro. Sí. Y queso. El queso le va bien a todo (según mi teoría, que soy muy de queso yo).
Hay que tener en cuenta que yo tengo un pequeño "handicap". No puedo comer carne de mamífero, lo cual quiere decir que tampoco embutido. Nada. No puedo comer jamón. Unos cupcakes salados con jamón o chorizo tienen que estar de muerte, pero...esos haré un día que no vaya a comerlos yo.

Solo deciros que la combinación de sabores muy buena, así que no me enrollo (que tengo que salir por ahí a disfrutar de la fiesta...) y aquí os dejo la receta. Hice 6 cupcakes, pero os voy a poner las cantidades para 12 que suele ser lo normal.



CUPCAKES DE CALABACÍN, ATÚN Y QUESO (12 CUPCAKES)

Ingredientes
  • 150 g. de mantequilla con sal (o de la normal y luego echáis sal a la masa)
  • 50 g. de azúcar
  • 2 huevos
  • 150 g. de harina
  • 150 g. de calabacín
  • 2 latas de atún
  • queso rayado (al gusto)
  • 60 ml. de leche
  • 1 cucharadita de levadura
Preparación
Pelamos y rayamos el calabacín y lo reservamos.
En un bol, batimos la mantequilla junto con el azúcar hasta que se forme una crema. A continuación añadimos un huevo y batimos hasta que se integre. Lo mismo con el otro.
Tamizamos la harina junto con la levadura (y la sal si nuestra mantequilla no era salada) y la vamos añadiendo a la masa mientras batimos. Por último, la leche.
Escurrimos la lata de atún (muy importante porque si es atún en aceite y no lo escurrimos, luego la magdalena nos quedará muy "grasosa"). Lo añadimos a la masa y también el calabacín. Mezclamos con una cuchara de madera para repartirlo de forma uniforme. Solo nos quedaría el queso rayado, que lo repartimos por la masa al gusto. Le da un toque de sabor muy bueno.
Precalentamos el horno y vamos repartiendo la masa en el molde.



Las horneamos durante 25 minutos a 180ºC.
Cuando estén, las sacamos y las dejamos enfriar. Si las habéis puesto con molde de papel, a los 5 minutos hay que sacarlas del molde para que el papel no se estropee ni se abra.


Y ya las tenéis!! Si las podéis comer aún calentitas mejor, que están más ricas. Luego podéis acompañarlas o decorarlas como queráis. En este caso yo dejé la mitad tal cual y a la otra mitad les puse un "copetillo" de queso Philadelphia. ¡Os lo recomiendo! El sabor del queso y al estar fresquito le da un contraste riquísimo.


A ver si os animáis y las probáis. Yo este mes prometo aparecer más por aquí con más cositas. De momento ya tengo 3 pedidos y mi cumpleaños de por medio, así que habrá novedades seguro!!

Muás!!!!


lunes, 23 de abril de 2012

¿Y por qué no? ¡¡Cupcakes de calabacín!!



Eso es lo que pensé: ¿por qué no?  Si hay cupcakes de zanahoria (y están bueníiiiisimos por cierto) y existe el bizcocho de calabacín...¿por qué no crear unos cupcakes de calabacín?

















Sí, sí, de calabacín. Solo se puede decir una cosa: sorprendentes!!


¿Habéis probado alguna vez el bizcocho de calabacín? Sorprende mucho su sabor, pues para nada te esperas que esté tan bueno y que sepa tan poco a calabacín. La receta me la pasó mi vecina de abajo, una señora muy majetona que me ha dado un montón de recetas, además de la cena varios días. Una de esas recetas era el bizcocho de calabacín, super fácil de hacer y que ella lo hace para "engañar" a los nietos y así coman verdura...

La primera vez que lo hice me sorprendió muchísimo: un bizcocho muy esponjoso, muy suave y con un sabor....a magdalena de la Bella Easo (y que me perdonen los de la marca, pero es que lo primero que pensé!)

Así que si se puede hacer un bizcocho, se podrán hacer unos riquísimos cupcakes, ¿o qué? Pues sí!! Se pueden, están riquísimos...y tenéis la excusa de decir que estáis comiendo verdura!!!!jajajajaja.


Para la crema lo tenía clarísimo: frosting de queso! Le pega a todo. Bueno, es que para mí, cualquier cosa que lleve queso me pega con lo que sea, que sí, que sí.


Bueno, pues para no enrollarme más y no teneros en ascuas, ahí va la super receta:

CUPCAKES DE CALABACÍN

Ingredientes (para unos 12 cupcakes)
  • 1 calabacín mediano
  • 3 huevos
  • 120 ml de aceite suave
  • 150 g de azúcar
  • 200 g harina (quizá un poquillo más)
  • 1 1/2 cucharadita de levadura
  • 1 pizca de sal
Preparación

Pelamos el calabacín y lo partimos en trozos. Batimos los huevos junto con el calabacín (crudo, sí, que no cunda el pánico porque luego va al horno) en un bol con una batidora de cuchillas. Esto es muy importante porque queremos que el calabacín acabe totalmente hecho puré, que no se noten los trozos ni nada.
Ahora ya podemos batir con una batidora de varillas o como lo hagamos tradicionalmente (se puede incluso seguir con la de cuchillas). Añadimos el aceite y batimos bien. A continuación agregamos el azúcar integrándola bien.
Tamizamos la harina con la levadura y la sal y la vamos añadiendo a la masa hasta obtener una masa homogénea.
Preparamos en el molde los papelitos para las magdalenas y los rellenamos con la masa hasta 2/3 de su capacidad.
Con el horno precalentado, los horneamos a 180º durante 20-25 minutos o hasta que al pincharlos con un palillo éste salga limpio. Cuando estén los sacamos del horno, los dejamos templar en el molde unos 5 minutos y luego los sacamos para que terminen de enfriarse en una rejilla.

Merece la pena probarlos así solos para apreciar el sabor que tienen. De verdad que es sorprendente lo poco (o más bien nada) que sabe a calabacín y el sabor a magdalena tan rico que tiene.


Para el FROSTING DE QUESO

Aunque ya he puesto más veces esta receta, por si acaso la repito porque suelo variar las cantidades o proporciones para ir probando:

  • 50 g de mantequilla (a temperatura ambiente
  • 120 g de queso de untar (tipo Philadelphia)
  • 150 g de azúcar glacé
Aunque en casi todas las recetas que se ven por ahí de este frosting usen mucho más azúcar, yo siempre le pongo menos porque no me guste que sepa demasiado dulce, no sé, me parece que al final tanto azúcar acaba matando el sabor del queso.

Preparación

Ponemos en un bol la mantequilla junto con el azúcar glacé y batimos bien hasta que formen una crema. Añadimos el queso y seguimos batiendo hasta que se integre todo bien. El queso da igual que no lo hayáis sacado de la nevera con tiempo, yo lo eché frío y ni se me cortó la crema ni nada.


Decoramos nuestros cupcakes al gusto y....a ver quién es capaz de adivinar de qué están hechos!!

Yo opté por seguir practicando con la boquilla 1M, ya voy controlando las flores!, y probé a hacer copetes. Luego las decoré con unas flores de fondant que hice para probar mis nuevos cortadores con expulsor. ¡Qué guays! Como podéis apreciar hay dos cupcakes con un copete muy pequeñito. No es que quisiera probar una decoración minimalista...que también, es que me comí parte de la crema a cucharadas y no me llegaba para ponerles más!! jijiji.



Por cierto, a ver si puedo hacer un mini-post para contaros el curso que hice el sábado a la mañana: talo y pastel vasco!!!!! ¿Que no sabéis lo que es ninguna de las dos? ¿Y podéis vivir tranquil@s? Pues ala, así no vais a tener más remedio que esperar a leer mi próximo post donde os lo cuente todo!! uajajajaja (risa malvada)

Muás!!

P.D. Menos mal que ayer domingo corrí una carrera de 16km (de los cuales prácticamente 15 eran cuesta arriba...)!!!! Porque entre los cupcakes, los talos, el pastel vasco,....buf!!!jejeje

Re-muás!!