...aunque lo parezca!! jejejeje. Y diréis, ¿entonces a qué viene ese nombre?
Pues muy sencillo, hace un tiempo, navegando por la red vi una recetilla de frosting de marshmallows (o nubes, como se ha dicho toda la vida de dios) y tenía un montón de ganas de hacerlo. El caso es que dije, vale, frosting de nubes, pero ¿qué le pega a un frosting de nubes? Una magdalena de chocolate? De vainilla? Es que me parecía que quedaba tan soso el nombre... ¿Qué le pega a las nubes? Y me vino la inspiración: cielo!!!! Ahora había otro problema: ¿a qué sabe el cielo? Pues bueno, en mi caso el cielo es azul (lógicamente....o no tanto! Que aquí la mayoría de los días el cielo tiene más bien un toque grisáceo...) y tiene sabor a azahar.
No os lo he comentado, pero yo tengo un serio problema con las chuches en general y con las gominolas en particular. Me vuelven loca. En casa siempre tiene que haber gominolas. De hecho las compro en un mayorista. Según me cuenta mi madre, cuando estaba embarazada el único antojo que tuvo fue el de comer ositos de gominola. Así que deduzco que mi adicción viene de ahí! jeje.
Así que cuando vi lo de frosting de nubes...tenía que hacerlo!!!!! El caso es que vi hace tiempo la receta, pero ni me la apunté ni me acuerdo dónde fue, solo me acordaba que era con nata y nubes de gominola. En casa tengo un montóooooon de nubes, así que eso no era problema, También tenía nata de cuando hice los cupcakes de zanahoria, así que no tenía excusa. Además las nubes me encantan!! Me podría pasar horas simplemente con la nariz pegada a una para olerla. Es un olor adictivo!!
Pero he tenido que "inventarme" la receta sobre la marcha... Sabía que había que derretir las nubes con la nata, calentándola y luego había que montarla. Pero no recordaba cómo....así que a investigar!! Como no tengo paciencia (y eso en este mundo de la repostería es un problema...) he calentado la nata en el microondas y luego le he echado las nubes para que se fueran derritiendo con el calor. Lo he dejado enfriar para luego montarlo, como se hace con otras recetas que llevan nata y algo más (como el ganaché). El caso es que si pretendéis hacer esto....paciencia!!!! No monta ni a la de tres!! Después de un buen rato no había manera, parecía que se espesaba pero no terminaba de montar, de hecho han empezado a solidificarse pequeños trocitos de las nubes y parecía que estaba cortado. Así que como tenía que comer para irme a trabajar, lo he metido a la nevera para que se enfriara de nuevo y acabar de montarlo después. Al volver, SORPRESA!! Había adquirido una textura tipo mousse estupenda! Pero una que es medio lerda, ha pensado que lo tenía que batir.....ERROR!!!!! Se ha vuelto a poner líquido! Así que ale, a la nevera otra vez para que endureciera. En fin...es lo que tiene experimentar!!!!jijiji.
Como os podéis imaginar, tenía un miedo tremendo de que estuviera asqueroso! Pero nooooooooo. Me he comido uno hace poco y.....ummmmmmmmmmmm. Está riquísimo!!!! La magdalena es un poco mazacotilla para comerla sola, pero de sabor está muy rica.
Y el frosting....bua! Riquísimo!! Para comerlo solo puede resultar muy dulce a la gente que no le emocionan especialmente las nubes. Pero es que la combinación de los dos....indescriptible!! Muy bueno, así que os animo a probarlo.
INGREDIENTES PARA 12 CUPCAKES (a mi me han salido 12+1, qué mala leche!!):
- 140 g. de mantequilla (a temperatura ambiente)
- 100 g. de azúcar (en realidad son 200, pero yo siempre le echo menos, teniendo en cuenta que va a llevar un frosting dulce encima...)
- 2 huevos
- 230 g. de harina
- 1 y media cucharada de levadura
- una pizca de sal
- 150 ml. de leche
- una cucharada de aroma de azahar
Batimos la mantequilla con el azúcar hasta conseguir una crema. Añadimos un huevo y seguimos batiendo hasta que esté integrado. Entonces añadimos el otro y lo mismo. En este punto podría parecer que la mezcla se ha cortado, porque a veces aparecen como grumos. Pero trankis! Cuando le echemos la harina volverá a parecer normal!
Tamizamos la harina con la sal y la levadura. Este paso puede parecer un rollo, de hecho yo muchas veces ni lo hacía, pero la verdad que se nota diferencia en el resultado de hacerlo a no hacerlo. Así que paciencia, y seréis recompensadas! Vamos añadiendo la harina a la masa meclando bien, en este punto nos ayudaremos ya de una espátula o cuchara de madera.
Por otro lado, mezclamos la leche con la esencia de azahar (que menos mal que no sabe como huele, porque me he asustado al abrir el bote!!). Lo añadimos a la masa y mezclamos bien. Como quería que la masa fuera azul para simular el cielo, le he añadido unas gotas de colorante azul. El caso es que le he echado 4 gotas pensando que sería suficiente, pero el color que ha cogido no era del tono deseado...creía que luego le subiría más el color, como pasa cuando tiñes fondant o glasa, pero no. Al final en lugar de azul mi cielo ha quedado de un color indefinido. A mi novio le he enseñado una foto y me dice: por qué son verdes??
Precalentamos el horno a 180º y vamos vertiendo la masa en los moldes. Llenamos unos 2/3 del molde para evitar que se nos desparrame y lo horneamos unos 20-25 minutos, depende del horno, o hasta que salga un palillo limpio por el centro.
Aquí está el antes y el después del horno. Más que azul es color Lago Ness...jejeje.
FROSTING DE NUBES:
- 200 ml de nata para montar (mínimo 35% de M.G.)
- nubes o marshmallows (la cantidad al gusto del consumidor)
- 4 gotas de aroma concentrado de nubes
La preparación ya os he contado antes cómo la he hecho. No le he puesto azúcar porque creo que ya es suficientemente dulce de por sí, pero eso va por gustos. Para otra vez igual estaría bien probar a hacerlo de otra manera, tal vez primero semimontar la nata sola, luego derretir las nubes en el microondas o al baño maría y luego añadirlo a la nata y terminar de montarla. No sé. Igual estoy diciendo una barbaridad y cuando añades la nubes se corta y se vuelve eso un aguachirri asqueroso!! Todo es cuestión de investigar.
Se pone el frosting encima de la magdalena (sobra decir que se tiene que haber enfriado completamente!)
Y luego se decora con sprinkels...
...O con lenguas de gominola!!
Y listo!!!!! Solo queda disfrutarlas!! Espero que os hayan gustado.
Muás!!
Como me he reido!!!! debe saber rico este toping, vamos que lo haré! :)
ResponderEliminarMuchas gracias guapa!! La verdad que la gente que lo probó se sorprendió mucho...pero para bien!!!!jejeje. Es una combinación de sabores sorprendente pero muy rica, así que te animo a que la pruebes! ;)
ResponderEliminartengo un problema ... lo leo y me parece que debe estar genial, pero no puedo ver ni una sola de las imagenes :(
ResponderEliminarHola Gabriela!!! Jo, tienes razón :( no se ve ninguna foto. Pero esta receta fue de las primeras que hice y luego me tocó cambiar el sistema de subir las fotos al blog. Así que no sé qué fue lo que hice que desaparecieron!! Voy a tener que repetirlos para volver a hacerles fotos... Ya lo siento
EliminarHola Chicas hace poco vi en divinity en uno de sus programas de tartas y cupckaes de dos hermana como hacían ck con cobertura de nubes me pareció una algo tan rico que he comenzado a investigar la receta por que allí no la ponen ni la dicen y me pareció entender que la receta contenía nata nubes clara de huevo y gelatina sin sabor....y tenia una consistencia mas espesa que el chantilly o la nata montada....y se tenia que aplicar enseguida porq se hincha enseguida....la cuestión es alguien ha probado algo así.....intentare hacer la receta de este post y ver si es parecida. Si alguien sabe el otro método.. QUE LO DIGA!!!!!
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