Mini donuts red velvet

La versión donuts, y mini, de la clásica y archi-conocida tarta (o cupcake) red velvet.

Aunque no os lo creáis, aún no había hecho red velvet. Ni en tarta, ni en versión cupcake. Nada.

Es más, ni siquiera lo he probado!!!!  

Sí, sí, ya sé, es imperdonable. Más de año y medio de "bloguera-repostera" y aún sin probar o hacer este básico. El red velvet o terciopelo rojo es una de las recetas de tarta más populares en Estados Unidos y, poco a poco, en todo el mundo. No hay repostero que se precie que no haya hecho unos cupcakes red velvet, o una layer cake.

Será por ese color rojo pasión, o por el toque de cacao, o por la combinación con la crema de queso. El caso es que todo el mundo que lo prueba habla maravillas. Menos yo, que no lo había probado.

Lo curioso es que lleva muuuuucho tiempo entre mi lista de pendientes. Pero oye, que siempre se me ocurren otras cosas para hacer antes!! Es que es como tan típico, que lo voy dejando "para otra ocasión".

Hasta que el otro día vi la versión mini-donuts. Y me enamoré.

Una ocasión de preparar red velvet, pero sin que sean los clásicos cupcakes o una tarta, encima en versión bocados-para-picar-sin-sentirte-demasiado-culpable y que, para hacerla aún más perfecta, se puede hacer en la máquina de donuts!!!

Si no tenéis la máquina (no sabéis lo que os perdéis), también los podéis hacer en la máquina de cake-pops. ¿Que tampoco la tenéis? Pues los podéis hacer al horno en un molde de donuts (pueden ser grandes o minis). Y ya, si tampoco tenéis un  molde de donuts para horno...¿qué hacéis ahí sentados leyendo en lugar de ir corriendo a compraros uno???? Jejejejeje. Es broma, lo podéis hacer en versión muffin y también quedarán muy bien ;)

Lo bueno de la maquinita de mini-donuts es que no hay que andar encendiendo el horno y en 5 minutos se nos hacen.

¿Lo malo? ¡¡¡¡Que son un vicio!!!!!

Como son tan pequeñines, te los comes de un bocado casi sin darte cuenta. Entonces te comes otro, porque total, son pequeños. Venga, por otro no pasa nada... Y para cuando te das cuenta ya te has zampado 10. Que no es que me haya pasado a mí, que me lo ha contado una amiga... ;)

Pero bueno, que ya glaseados y todo no llega ni a 50 calorías cada donuts. ¿Eso qué es? Si al día podemos comer 2000 calorías!! Ná, me voy a comer los que quedan, ya total...

Ya veis en algunas fotos que, al hacerlos en la máquina, la parte del donuts que queda abajo adquiere un tono más marrón, como más tostado. En cambio, la parte de arriba y la de dentro se quedan de un color rojo intenso. Si los hacéis al horno se os quedarán igual de rojos por todos lados.

Mira que estuve por hacerlos sin colorante, porque no soy muy fan de echar colorante a las cosas que me voy a comer. Pero entonces no habrían sido auténticos red-velvet y no hubieran molado tanto.

No, no se me ha puesto la leche mala, es que es leche de arroz!

MINI-DONUTS RED VELVET

Inspiración: adaptado de esta receta de Con las Zarpas en la Masa. Le añadí cacao, ya que la receta original no lleva y siempre había visto que el red velvet lleva cacao. El glaseado es cosa mía.

Dificultad: Ninguna. La mayor dificultad puede ser lograr el color rojo (yo usé colorante Extra Red de Sugarflair)

Tiempo de preparación: 20 minutos.

Cocción: con la máquina de donuts, 4-5 minutos cada tanda. En el horno dependerá del tamaño y formato en el que los hagáis (mini donuts, donuts grandes, muffins,...)

Cantidad: 47 mini donuts. (En la receta original pone que le salieron 28!!!!)

Ingredientes

Para los mini donuts

• 1 huevo
• 90 g. de azúcar
• 125 ml. de buttermilk (si no tenemos, usamos 110 ml. de leche + 15 ml. de zumo de limón)
• 25 g. de aceite
• 1 cucharadita de vainilla
• colorante en gel rojo
• 130 g. de harina
• 1 cucharada de cacao en polvo
• media cucharadita de levadura

Para el glaseado

• 100 g. de queso crema
• 100 ml. de nata para montar
• 50 g. de azúcar glas

Preparación

Comenzamos preparando el buttermilk (a no ser que tengamos comprado). Para ello mezclamos 110 ml. de leche con 15 ml. de zumo de limón y lo dejamos reposar durante 15 minutos.

Tamizamos la harina junto con la levadura y el cacao.

Batimos el huevo con el azúcar hasta que esté espumoso y blanquee. Añadimos el aceite y el buttermilk, sin dejar de batir. Cuando tengamos una masa homogénea, echamos la vainilla y el colorante rojo. Hay que añadir colorante suficiente para que nos quede una masa de un color rojo, pero sin pasarnos. 

Por último, añadimos la harina con el cacao y batimos a velocidad baja, lo justo para que se integre. 

Enchufamos la máquina de donuts y cuando se encienda la luz, vamos vertiendo masa con cuidado en los huecos. Con una cucharada de masa en cada hueco vale, para que no se desborde. Los tenemos unos 5 minutos para que se hagan bien. Sacamos con cuidado de no quemarnos, los pasamos a una rejilla para que se enfríen y hacemos otra tanda. A mí me dio para hacer 6 tandas enteras (es de 7 donuts mi maquinita) y otra tanda de 5. 

Para preparar el glaseado, batimos el queso con el azúcar. Una vez se haya integrado, añadimos la nata y batimos rápido hasta que se monte y obtengamos una crema espesa. Guardar en la nevera hasta el momento de usarla.

Glasear los donuts justo en el momento de consumirlos, ya que al llevar nata y queso, si los dejamos glaseados la crema se seca y queda fea (y mala).

Trucos / Consejos / Variaciones

• podéis quitar el glaseado y comerlos solos, están también muy buenos. La receta original los glaseaba con chocolate blanco.
• si no os gusta andar echando colorante a la comida, los podéis hacer sin él, os quedarán de color marrón clarito. 
• no es necesaria la máquina de donuts para poder hacer esta receta. Existen moldes de donuts para hacer en el horno. También podéis hacer muffins. O incluso sirva la máquina de cake pops.
• no saben como los donuts "normales". Normalmente, los donuts se fríen, con lo cual unos hechos al horno o en máquina saben más tirando a bizcocho. 
• otra idea de mini donuts la podéis ver aquí (de calabaza)
• si los preparáis y  no podéis parar de comerlos, no os preocupéis, es normal ;)

Ya veis que fácil es preparar unos donuts absolutamente deliciosos y llamativos. Y no, no están trucadas las fotos, yo no tengo Photoshop ni nada de eso. Realmente quedan así de rojos. 

No sé si la versión tarta o cupcake de red velvet sabrá así de rica, pero a nosotros los donuts nos han encantado. Es más, han volado en casa. Seguro que los repito otro día y seguiré usando la máquina de donuts, porque las dos recetas que he hecho me han encantado. Quedan súper esponjosos y jugosos! Ay madre, ¡¡qué peligro y qué vicio!!

Muás