Un tiramisù diferente

Hoy os traigo una receta que....ummmmmmm!!!!! Ay, solo de pensarlo empiezo a salivar.

 No se trata ni de cupcakes, ni de galletas ni nada así decorativo monísimo. Es algo que os va a encantar: fácil de hacer, rápido, fresquito ahora que empiezan los calores, os permite muchas posibilidades de cambiar el sabor del topping (vamos, de lo que le echamos encima) y que está riquíiiiiiiisimo! Si tenéis alguna comida o algún compromiso, con este postre triunfáis!!

La receta está sacada de un recorte de una revista que tenía por ahí por casa, en el apartado de "recetas pendientes" (hay que ver la de recetas que tengo ahí esperando!!). Creo que lo saqué de algún semanal de estos del periódico, pero no me hagáis mucho caso....

Para variar, le cambié alguna cosilla. Originalmente el topping (lo de arriba) eran manzanas confitadas (madreeeee, qué bueno tiene que estar así!!), pero cuando le enseñé la receta a Iñaki (léase, mi novio) me dijo que a él eso de las manzanas confitadas como que no, a ver si no lo podía cambiar por otra cosa. Pues dicho y hecho, lo sustituí por esta maravilla:

Tenía desde hacía tiempo esta mermelada que me regaló mi ama "pa esas cosas que haces tú", así que me pareció buena ocasión para estrenarla.

TIRAMISÙ DIFERENTE (no se me ocurre qué nombre ponerle!)

Ingredientes (para 4 ó 6 personas, dependerá de los vasitos o tarros donde lo sirváis)

•  6 galletas Digestive (o las que os gusten)
• 3 huevos
• 250 g. de queso mascarpone
• 3 cucharadas de azúcar
• mermelada (o lo que se os ocurra)

Preparación

Desmenuzamos las galletas y las repartimos en los vasos en que vayamos a servir (yo usé unos tarros de cristal de yogur).
Separamos las claras de las yemas de los huevos.
Mezclamos las yemas con el azúcar y batimos hasta conseguir una mezcla blanquecina y ligera (más o menos, no os obsesionéis con esto tampoco). Agregamos el queso mascarpone y seguimos batiendo.
Aparte, montamos las claras a punto de nieve y cuando estén, se las agregamos a la mezcla anterior mezclando con movimientos envolventes para que no se bajen.
Distribuimos esta crema sobre las galletas de los vasos.
Por último, echamos por encima la mermelada al gusto y lo metemos al frigorífico durante al menos 2 horas.

Ya veis, super sencillo, se hace en un plís y encima es fresquito. Lo mejor de esta receta, para mí, es el juego que da. Ahí os dejo unas cuantas ideas de posibles variaciones que se me vienen a la cabeza (joe, qué hambre me está entrando con la tontería!):

• usar galletas de mantequilla, o galletas napolitanas, o cualquier otra que nos guste
• usar como base bizcochos desmenuzados en lugar de galleta. O incluso algún bizcocho empapado en café o licor (como en el auténtico tiramisù)
• poner encima manzana confitada y espolvoreada con canela (para confitar la manzana simplemente se pocha bien en una sartén con mantequilla)
• usar mermelada del sabor que queramos
• poner trozos de fruta fresca
• chocolate caliente
• simplemente espolvorear con cacao en polvo
• ...  

Pues anda que no hay opciones, os quejaréis de versatilidad!!!!!jajajajaja.

Espero que os haya gustado, que la probéis...y que me lo contéis!!!!! O las ideas y variaciones que se os ocurran. Estare encantadísima de leerlas, incluso en mi mail: iratxeayala@gmail.com o en el Facebook de Gallecookies.

Muás!!!!!!!