Nubes (marshmallows) para San Valentín (o cuando sea)

Nubes, jamones, marshmallows, masmelos, malvaviscos, ... e infinidad de nombres para referirse a esta delicia. Sea como sea, están buenísimas y son una auténtica adicción que ahora además podréis preparar en casa!!

Yo no soy mucho de San Valentín. Bueno, en realidad no soy nada de nada. El amor se demuestra a diario y en las pequeñas cosas, como que te dejen post-its en la cocina los días que no os vais a ver en todo el día. Pero claro, hay gente que sí que lo celebra o que, por lo  menos, le gusta tener un pequeño detalle ese día.

Me sabía un poco mal no publicar nada de nada para esta fecha, pero tampoco quería ponerme ñoña porque no soy así. Así que como hacía tiempo que quería hacer nubes en casa pensé: ¿y si les doy forma de corazón y así mato dos pájaros de un tiro?

Son adictivas. No os podéis imaginar cuánto! Si las comerciales ya son adictivas imaginaros estas hechas en casa, que además las podéis hacer del sabor que queráis y hasta rellenarlas.

Lo bueno es que además les podéis dar la forma que queráis, con lo cual os sirven para San Valentín, para el día de la madre, para un cumpleaños o para lo que os de la gana. O cuadradas simplemente para zampar y zampar en una mítica tarde improductiva de domingo tirados en el sofá con la manta.

He buscado mucho para ver cómo se hacen y resumiendo podría decirse que he visto dos vertientes: las que lo hacen a lo "made in USA" con corn syrup o glucosa y las que lo hacen "montando" gelatinas de sabores para lograr la textura esponjosa característica. Aunque también las he visto que usan claras montadas... Vamos, que cada uno las hace como quiere!

Yo he optado por la "made in USA", no porque me gusten especialmente este tipo de recetas, sino porque tenía en casa glucosa que compré hace tiempo no sé muy bien para qué. También tenía corn syrup, que estaba sin estrenar no sé muy bien tampoco para qué lo compré. Y bueno, así también probaba los auténticos "marshmallows". Aunque confieso que no soy nada fan de las recetas americanas, ya que me parece que utilizan muchos ingredientes raros y a mi entender bastante poco saludables.

Lo bueno de hacer las nubes en el modo "made in USA" es que les podéis dar el sabor que queráis. Con la receta base se consiguen las nubes blancas pero luego les podéis variar el sabor al gusto, ya sea usando fruta liofilizada, extractos o aromas, pastas de sabores,... Si las hacéis con gelatina básicamente dependéis de los sabores disponibles que hay en las gelatinas comerciales.

Si queréis usarlas para alguna ocasión especial o simplemente para hacerlas más llamativas, también podéis teñirlas utilizando colorantes comestibles. Aunque yo prefiero dejarlas como salen, que ya bastante "veneno" me meto al cuerpo a diario.

Las quería haber hecho de frambuesa, con unas frambuesas liofilizadas que tenía en casa. Pero al machacarlas, no se me quedaron en plan polvo, sino en trozos un poco más grandes. Con lo que no se disolvieron y tuve que colar la mezcla. Lo curioso es que  la mezcla quedó de un color rojo intenso precioso, pero al montarla se quedó blanca. Así que mis nubes son blancas (con un ligeríiiiiisimo tono rosáceo según cómo le dé la luz) y tampoco se nota el sabor a frambuesa. Vamos, que me las podía haber ahorrado! Jejejeje.

Pero de sabor están de muerte, como las clásicas nubes que se compran. De hecho, el catador oficial nada más probarlas dijo: "ostia! Si saben como los jamones de la tienda!!"

NUBES (MARSHMALLOWS)

Inspiración: esta receta (después de mirar muuuuuuchas por internet)

Dificultad: difícil no es, es más que se necesitan ingredientes un poco raros.

Tiempo de preparación: 30 minutos.

Reposo: 12 horas.

Ingredientes

• 20 g. de gelatina en polvo (2 sobres)
• 90 ml. de agua + 60 ml.  más
• 320 g. de azúcar
• 200 g. de corn syrup o de glucosa
• una cucharadita y media de vainilla
• media cucharadita de sal

Preparación

1.- Ponemos a hidratar la gelatina en 90 ml. de agua.

2.- Calentamos en un cazo 60 ml. de agua junto con el azúcar y el corn syrup o la gelatina. A fuego medio hasta que empiece a hervir. Tiene que alcanzar una temperatura de 115ºC, no pasar nunca de ahí porque entonces carameliza!! Si no tenéis un termómetro de cocina, sabréis que ha llegado a esa temperatura cuando rompa a hervir y esté un par de minutos.

3.- Ponemos en el bol de la batidora la gelatina hidratada y la batimos unos segundos para que se desapelmace. Con el accesorio de varillas y a velocidad baja, vamos añadiendo poco a poco la  mezcla que hemos preparado. Subimos la velocidad a media-alta y batimos durante unos 10-15 minutos. A mitad del proceso (a los 8 minutos hice yo) le añadimos una pizca de sal y la vainilla. Tenemos que lograr una mezcla consistente, de apariencia similar a la del merengue duro.

4.- Engrasamos una fuente y depositamos la masa sobre la misma. Con ayuda de una espátula alisamos la superficie (es bastante pegajosa-pringosa).

5.- Dejamos reposar 12 horas.

6.- Desmoldamos sobre una superficie espolvoreada con azúcar glas para que no se pegue. Lo cortamos con un cortapastas en forma de corazón (o la que sea) o lo podemos cortar en tiras y después en dados. Rebozamos bien con azúcar glas y con ayuda de un colador las agitamos para quitar el exceso de azúcar.

Consejos / Trucos / Variaciones

• la "pasta" resultante es bastante pegajosa y pringosa, así que el molde que vayamos a usar hay que engrasarlo o enharinarlo muy bien.
• si no tenéis o no queréis o no podéis comprar corn syrup o gelatina, en esta otra receta os viene explicado cómo hacerlas con gelatina de sabores.
• la fruta liofilizada se añade bien machacada en el punto 2 en el cazo. En cambio, si vamos a ñadir extractos o aromas o fruta en pasta, lo añadiremos en el punto 3, a la mitad del proceso de batido.
• Si queréis añadirle colorante para que queden más llamativos o para hacerlos temáticos (unos corazones rojos quedarían muy bonitos), el colorante se añade en el punto 3 en lugar de la vainilla.
• es imprescindible hacerlo con una batidora de varillas, ya que de lo contrario lograr montar la mezcla para que logre esa esponjosidad es imposible (ni el "Chuacheneguer" podría!!).
• si os soy sincera, el azúcar lo eché a ojo. No sé si eché más o menos del que indica la receta, pero me quedaron de maravilla ;)
• no os puedo decir cuántos días se conservan bien porque en cuestión de 4 días ya han volado.

Estáis deseando hacer ya nubes o jamones en casa, ¿a que sí? Aunque os parezca laborioso en realidad no lo es, simplemente es hacerse con un termómetro y una batidora con varillas: calentar y montar. Y tendréis unas chuches caseras que nada tendrán que envidiar a las comerciales.  ¡Son un vicio!

Seáis o no de los que celebran San Valentín, tengáis o no pareja y hagáis lo que hagáis este fin de semana, ¡a disfrutar! Y si es en la cocina mejor que mejor.

Y no os olvidéis que estoy de sorteo hasta el día 28!!!!! Que no todos los días tiene uno la oportunidad de llevarse una caja con productos de alimentación "by the face"!

Muás
Iratxe